Madrid es una ciudad llena de historia, de recovecos, de silencios y de bullicio, una urbe llena de contrastes que atrapa y fascina tanto a los visitantes que llegan a conocerla como a los madrileños que llevamos viviendo aquí toda nuestra vida.

Siempre sorprendente, encontramos algunos rincones secretos que pasan desapercibidos para la mirada de muchos de los transeuntes que pasean por las preciosas calles del centro de la ciudad. Hoy os voy a desvelar tres de estos lugares “ocultos” que no son de atracción turistica ni suelen aparecen en las guías de viaje de Madrid. Rincones con encanto, coquetos, discretos... que invitan a saborear más a fondo un Madrid diferente que enamora a cada paso.

Jardín del Príncipe de Anglona

Un pequeño y delicioso parque anexo a la madrileña Plaza de la Paja en La Latina y junto al Palacio de Anglona. Un jardín nobiliario del S.XVIII desconocido incluso para muchos madrileños ya que pasa prácticamente desapercibido. Es un rinconcito romántico, bucólico, donde puedes pasear en pareja, leer un buen libro lejos del mundanal ruido y disfrutar de un momento de relajación en un entorno priviligiado. Árboles frutales, setos, rosales, suelo pavimentado en piedra... un jardín secreto obra de Nicolás Chalmandrier en 1761 pensado como zona de recreo del Palacio. Hoy en día el parque pertenece al Ayuntamiento de Madrid y se puede visitar con horario restringido.

Pozo del Milagro

Continuando el recorrido por el Madrid de los Austrias encontramos la casa en la que vivió San Isidro Labrador, patrón de Madrid, con su esposa, Santa María de la Cabeza, y su hijo San Illán. Esta casa se ha transformado en el Museo de San Isidro-Los Orígenes de Madrid, muy interesante de visitar ya que, además de conocer la vida en la Villa desde los orígenes, conserva joyas como el patio renacentista, la capilla y el pozo que tenía la familia para abastecerse de agua, conocido como el Pozo del Milagro. Este apelativo se debe a la atribución a San Isidro del milagro de salvar la vida de su hijo al hacer subir las aguas hasta el borde del brocal del pozo gracias a la fé que profesaba a la Virgen. El museo está ubicado en la Plaza de San Andrés 2 y es de entrada libre.

La Plazuela de San Javier

Es la plaza más pequeña de Madrid, una coqueta plazita que sólo cuenta con dos números y que es un rinconcito encantador. Tranquila y pausada, la diminuta plaza permanece ajena al ajetreo que tan sólo a unos metros de la misma generan los viandantes que visitan o pasean por el centro de la Villa. Cuentan que en esa pequeña plaza vivía una joven que era objeto de las atenciones del famoso bandolero Luis Candelas y también fue escenario de la zarzuela Luisa Fernanda. Un agradable recoveco de la ciudad que respira historia y que es una parada de lo más agradable en un paseo por las fascinantes callejuelas del viejo Madrid.

Poco a poco os iré descubriendo más rincones secretos de esta ciudad que alberga tesoros e historias ocultas para la mayoría de sus habitantes y visitantes. Paseos que descubren un Madrid que conserva muchos espacios escondidos de las miradas de aquel que camina con la prisa propia de una gran metrópoli.

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