Descubre cómo abrir un estudio de yoga y poner en marcha tu nueva aventura empresarial, desde los precios de los equipos hasta los costes de puesta en marcha.
En 2019 la pandemia de COVID-19 convulsionó el mundo. Tras largos periodos de confinamiento, asistimos a un aumento del número de ciudadanos que expresan su interés por la salud y el bienestar. De hecho, según un estudio, más del 79% de los españoles dijeron que la salud era su principal prioridad en 20201.
Como resultado de estas tendencias fitness, prácticas de ejercicio ancestrales como el yoga se han vuelto cada vez más populares. La práctica de disciplinas mentales, físicas y espirituales se ha duplicado en la última década y no muestra signos de desaceleración. En España, el sector de la salud y el fitness facturó unos 2.352.000 € en 2019, lo que representa un crecimiento del 3,3% con respecto al año anterior2.
Para los profesores de yoga y los emprendedores, nunca ha habido un mejor momento para aprovechar este mercado en crecimiento abriendo su propio estudio de yoga. Una de las ventajas de abrir un estudio de yoga es que los costes de puesta en marcha suelen ser bajos, especialmente si ya eres un instructor de yoga con licencia. Sin embargo, aunque los negocios de yoga son una pequeña oportunidad de negocio accesible, se necesita algo más que la capacidad de dar una clase y la pasión por el tema para abrir un estudio de yoga con éxito. Al igual que la mayoría de los negocios, requiere un conocimiento de las operaciones comerciales junto con el equipo adecuado, en este caso, un equipo específico de yoga.
Para ayudarte a arrancar y dar el pistoletazo de salida, sigue leyendo para descubrir cuánto costaría abrir un estudio de yoga.
Aparte de una cuidadosa planificación, abrir un estudio de yoga con éxito requiere dinero – pero los resultados pueden ser extremadamente gratificantes para un aficionado al yoga. Para empezar, hay que construir un espacio que el público encuentre más propicio para la práctica del yoga. Al mismo tiempo, algunos tipos de yoga requieren equipos especializados para facilitar las posturas y las prácticas. También necesitarás los permisos y licencias comerciales adecuados.
Una de las cosas más importantes que necesitarás antes de abrir un estudio de yoga es la que cuelgas en la pared: un certificado de formación para profesores de una escuela de yoga registrada. Estar certificado puede atraer a una mayor clientela. Las tarifas pueden variar, habiendo certificados de monitor de yoga desde unos 70 euros, aproximadamente3. La enseñanza o instrucción del yoga acarrea unos costes que pueden variar entre los 1.000 y los 1.500 al año4.
A la hora de planificar cuánto costaría abrir un estudio de yoga, el gasto más elevado que tendrás que considerar en el presupuesto es el pago del alquiler. Esto variará considerablemente en función de varios factores, como el tamaño del estudio, la ubicación y los valores inmobiliarios de la zona. En Madrid, el alquiler de espacios de yoga cuesta una media de unos 5 € por metro cuadrado5. Por un estudio de yoga estándar de 100 metros cuadrados cabe esperar que se paguen unos 500 €.
Recomendamos hablar con un agente inmobiliario para obtener una indicación de las condiciones de alquiler en el lugar deseado.
Una vez que hayas alquilado el espacio, es el momento de pensar en las reformas. Lo más probable es que tengas que invertir en alguna remodelación y redecoración para transformar tu espacio alquilado en un estudio de yoga adecuado. Estos son los costes típicos de renovación que deberías tener en cuenta:
Dado que la mayoría de los ejercicios de yoga se practican en el suelo, el material del suelo debe ser flexible para que resulte cómodo, pero lo suficientemente resistente para soportar las posturas típicas de yoga. También debe ser resistente al agua contra el sudor y los derrames de las botellas de agua y ser fácil de limpiar. Los suelos de vinilo ofrecen estas cualidades y pueden tener el aspecto de madera de verdad. Instalar suelos de vinilo cuesta entre 14 y 76 € aproximadamente por metro cuadrado, según el área a cubrir, el tipo de vinilo y la calidad del material6. Para un estudio de 100 metros cuadrados, la instalación de suelos de vinilo puede oscilar entre los 1.400 y los 7.600 €.
Invertir en pintura y redecoración es importante para garantizar que tu estudio de yoga tenga un ambiente tranquilo y relajante. El precio medio de pintar una habitación suele oscilar entre los 8 y los 12 € por metro cuadrado, dependiendo del estado de las paredes y del tipo de pintura7.
Afortunadamente, la decoración puede ser económica, ya que sólo se necesita un mínimo de mobiliario, como por ejemplo unos cómodos asientos en la entrada. Por lo demás, piensa en un ambiente zen, es decir, en una habitación limpia, despejada y abierta que resulte agradable y relajante.
Muchos practicantes de yoga traen sus propias esterillas a clase, pero es importante tener algunas a mano para los que no lo hagan. Decathlon ofrece colchonetas y esterillas antideslizantes a partir de unos 9,99 € cada una8. Algunas clases de yoga utilizan bloques, los cuales puedes adquirir desde unos 4,99 € aproximadamente9.
Para dirigir un estudio de yoga con éxito, tendrás que invertir en software de CRM, software de nóminas y sistemas de punto de venta que te ayuden a gestionar tu negocio. El precio por este tipo de software y equipos es muy variable, pudiendo llegar a pagarse hasta 100€ mensuales por un datáfono10.
También necesitarás un sistema de sonido de calidad si piensas poner música durante las sesiones de yoga. Los costes y la calidad pueden variar, pero un simple sistema de sonido suele ser suficiente. MediaMarkt ofrece equipos de sonido desde 70 hasta 1.500 €11.
Como cualquier negocio, abrir un estudio de yoga conlleva responsabilidades. Como profesor de yoga y propietario de un estudio de yoga, necesitarás un seguro de responsabilidad civil y profesional. Tendrás que contratar un seguro de responsabilidad civil y de accidentes personales para protegerte de las posibles demandas que puedan surgir en caso de que un alumno se haga daño durante la clase. Por término medio, puedes llegar a pagar entre 100 y 500 € por un seguro de responsabilidad civil12.
Si ya eres un profesor de yoga consolidado con una clientela fuerte, no tendrás que gastar mucho en marketing. Sin embargo, como nuevo profesional, el marketing será clave para conseguir que tus primeros clientes pasen por tu puerta. Como regla general, las start-ups españolas invierten una media del 3-9% de sus ingresos brutos en marketing y publicidad13.
Los salarios de los empleados son un gasto continuo que es necesario tener en cuenta a la hora de evaluar el coste de abrir un estudio de yoga. Un profesor de yoga principiante puede ganar aproximadamente 1.100 € brutos al mes, mientras que un profesor de yoga experto puede llegar incluso a los 3.000 €14. También tendrás que pensar en el proceso de contratación, ya que a menudo puede ser bastante costoso. Asegúrate de contar con fondos suficientes para anunciar tus puestos vacantes en las bolsas de trabajo y en las redes sociales para atraer a trabajadores de alta calidad.
El último paso es establecer los precios. ¿Cuánto vas a cobrar por tus servicios? Esto dependerá en gran medida de tu ubicación, ya sea en una zona cara de una gran ciudad o en un pueblo pequeño donde los gastos generales sean menores.
El coste medio de una sola sesión de yoga oscila entre los 25 y los 40 €15. Algunos profesores de yoga pueden llegar a cobrar hasta 60 € por clase16.
Deberías empezar por comprobar el precio de la competencia más cercana a tu ubicación y partir de ahí. También puedes ser creativo con los precios ofreciendo una tarifa mensual fija para clases ilimitadas, o una tarifa con descuento para los clientes que compren un número específico de clases por adelantado.
Es importante que diferencies tus servicios de los de otros espacios y clases de yoga de tu zona. Crea ofertas únicas para asegurarte de que superas a la competencia de tu estudio de yoga.
Otro aspecto crucial en el que hay que pensar es la retención de clientes. Haz que tus alumnos se sientan especiales compartiendo con ellos tu trayectoria personal y animándoles a dar su opinión para asegurarte de que obtienen lo que quieren de tus clases. Crea programas de fidelidad y ofrece regalos a quienes vuelvan regularmente a tu estudio. A su vez, crearás de forma orgánica estudiantes que actúen como embajadores de tu negocio, marketing de boca a boca y un próspero negocio de yoga.
La apertura de un estudio de yoga conlleva muchos costes, por lo que hay que asegurarse de tener en cuenta cada uno de estos factores a la hora de elaborar un plan de negocio. Abrir un nuevo negocio puede ser un auténtico desafío, pero con un poco de reflexión y una planificación minuciosa tendrás más posibilidades de éxito.
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