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Experiencia de conducción en el circuito del Jarama en un Westfield AeroRace
Opiniones de los clientes de Groupon
Acerca de esta oferta
Sobre la experiencia:
- Experiencia de conducción en el circuito del Jarama:
- Homenaje a los 60 en el que se puede salir de los límites habituales conduciendo y deslizando con los Westfield AeroRace, unos coches de 180 CV y 450 kg de peso, que mantienen la esencia de antaño: nada de controles electrónicos y sensaciones puras al volante. Se rompe con la conducción habitual de los coches de calle y se vive una experiencia de retos donde la adrenalina y la emoción están presentes
- Dentro de un circuito acotado de 6000 m², un monitor acompaña al usuario en todo momento y va explicando el funcionamiento y guiando las técnicas de conducción de los espectaculares AeroRace para que se pueda sacar de ellos el máximo rendimiento
- Además, podrás entrenar los reflejos del contra-volante con los "crazy cart", que permiten sentir la conducción deslizante más divertida. Con ellos se mejora la destreza y coordinación en un circuito especialmente diseñado para ello
- Los acompañantes podrán ver la evolución del piloto y esperarle cómodamente en una sorprendente zona de hospitality con terraza chill out
Qué incluye:
- Recepción y bienvenida
- Acceso a zona Hospitality
- Briefing
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Sesión 1:
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8 vueltas con crazy cart
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Sesión 2:
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Pilotaje con Westfield AeroRace, 6 vueltas
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Sesión 3:
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Copilotaje con Westfield AeroRace, 2 vueltas
Condiciones
⏳ Validez: 6 meses desde la fecha de compra.
⚠️ Límite: de 1 cupón por persona. Puedes regalar 2 adicionales.
☎️ Reservas y cancelaciones: con 24 horas de antelación, en el 683 188 947.
⚒ Información adicional:
✦ Fechas excluidas: todo el mes de agosto
✦ Bebidas no incluidas
Ver las Condiciones generales
Sobre Royal Experience Company
The Royal Experience Company es una experiencia de conducción del Circuito del Jarama; un homenaje a los años 60 en la que se puede salir de los límites habituales conduciendo y deslizando con los Westfield AeroRace, unos coches de 180 CV y 450 kg de peso, que mantienen la esencia de antaño: nada de controles electrónicos y sensaciones puras al volante. Se rompe con la conducción habitual de los coches de calle y se vive una experiencia de retos donde la adrenalina y la emoción están presentes.