La flamante capital de las Islas Baleares, Palma de Mallorca, es un destino turístico por excelencia, perfecto tanto para estancias cortas como para los periodos más largos durante todo el año. Y no solo por su excelente conexión aérea y marítima con las principales capitales europeas (una media de dos horas de viaje en avión), sino también por su rica tradición turística reflejada en una amplia oferta hotelera, patrimonial, cultural, gastronómica, de ocio y comercial. Bañada por el mar Mediterráneo, esta bella y cosmopolita ciudad ofrece al visitante un gran número de hoteles y apartamentos que cumplen sobradamente con las expectativas más exigentes de sus clientes. Por la cantidad de cosas que hacer Palma de Mallorca no tiene rivales e invita a descubrir sus antiguas calles impregnadas de historia, pequeños comercios tradicionales y otros establecimientos con encanto.